Diego Fernando Castaño Mosquera, un joven de 18 años proveniente de Buenaventura, Valle del Cauca, es admirado en toda Colombia después de haber logrado un puntaje perfecto en el Examen Saber 11° del Icfes, 500 sobre 500 en las pruebas.
Su historia de superación y dedicación se ha convertido en un ejemplo de perseverancia y esfuerzo, dice el estudiante que este es un sueño hecho realidad, “mi meta era alcanzar ese puntaje perfecto de 500 para acceder a la facultad de Medicina de la Universidad del Valle, ¡y lo logré!”, expresó Diego con emoción.
Este hito no fue solo un logro académico, sino una mezcla de sentimientos, de gratitud y de orgullo, lo primero que hizo fue celebrar con su madre, doña Mónica Liliana Castaño Mosquera, quien reside en Cali. El momento fue sumamente emotivo para ambos, y lo describió como una situación de lágrimas compartidas y agradecimiento por el esfuerzo de su mamá y la oportunidad que se les presentaba.
El joven proviene de un entorno de escasos recursos, y su logro se vuelve aún más destacable en este contexto. Además vale resaltar que tiene raíces en comunidades negras y valora la posibilidad de aprovechar otras oportunidades que puedan surgir en su camino.
Su deseo es mejorar su condición social y contribuir al progreso de su familia. Con su determinación y el puntaje perfecto que obtuvo en el Icfes, se encuentra en una posición privilegiada para hacer realidad sus aspiraciones y cambiar su vida para mejor.
Magdalena, también obtuvo histórico puntaje
Se trata de Sara Helena Orozco Martínez, una joven estudiante de la I.E.D. de Salamina, municipio ribereño situado la subregión Río del departamento del Magdalena, en el que también gracias a su esfuerzo y dedicación, obtuvo un puntaje casi perfecto, 478 de 500, lo que la consagró como una de las mejores en toda Colombia.
Las calificaciones en sus pruebas fueron de: 100/100 en matemáticas; 100/100 en naturales; 100/100 en sociales; 81/100 en lectura crítica; y 100/100 en inglés.
La joven, quien deja en alto el nombre del Magdalena, es prueba de que los estudiantes en todo el país sueñan con la excelencia académica. Su historia demuestra que con tenacidad y disciplina, los sueños pueden hacerse realidad, sin importar los obstáculos.