El Corredor Wüinn Mana, que conecta la Sierra Nevada de Santa Marta con la Serranía del Perijá, se ha consolidado en los últimos cinco años como uno de los principales refugios de biodiversidad en La Guajira. Este corredor, que abarca solo el uno por ciento del territorio guajiro, es hogar de una impresionante variedad de aves que representan el 42 por ciento de las especies registradas en toda la región.
Durante el 2024, el corredor Wüinn Mana ha sido testigo de una notable actividad ornitológica, destacando con la observación de 141 especies de aves en un solo día, gracias a la colaboración de observadores de aves, fotógrafos, estudiantes y miembros de comunidades locales. Estos esfuerzos han permitido identificar y catalogar aves que, al igual que su hábitat, son vitales para la conservación del ecosistema.
¡Conócelas y admíralas en su hábitat natural! La Guajira, y en particular este corredor, se ha convertido en un tesoro de biodiversidad que invita a ser explorado y protegido.
La región, que con su entorno único y diverso actúa como un crisol para especies de aves, continúa demostrando la importancia de su conservación y el potencial que tiene como destino de ecoturismo. Gracias a iniciativas como las de Cerrejón, se fortalece la protección de estos corredores ecológicos que no solo son hogar de aves, sino también fuente de agua y vida para las comunidades cercanas.
El Corredor Wüinn Mana no solo es conocido por ser “donde nace el agua”, sino también por ser el santuario de aves endémicas y migratorias que, año tras año, encuentran en este lugar un espacio seguro para su desarrollo y permanencia.