La primera píldora anticonceptiva masculina sin hormonas, ya está siendo usada por humanos que presentaron su cuerpo para los ensayos de la YCT-529, que demostró tener una eficacia de 99% sin efectos secundarios. La tasa de reversibilidad alcanzó el 100%.
La fase uno de ensayos clínicos inició en este mes de diciembre y están programadas para finalizar a mediados de 2024.
En esta etapa del estudio, los investigadores de YourChoice Therapeutics, la biofarmacéutica desarrolladora del anticonceptivo, evaluarán variables como la seguridad, tolerabilidad farmacocinética y farmacodinamia. El anticonceptivo se suministra en dosis orales únicas ascendentes a 16 varones voluntarios.
Esta es la primera vez que un anticonceptivo masculino no hormonal se prueba en humanos. Existen algunos medicamentos en desarrollo que utilizan agentes hormonales que suprimen la testosterona para prevenir la producción de esperma. La eficacia de estas propuestas no es óptima.
El equipo de YourChoice Therapeutics, explicó que, “la testosterona no detiene por completo la producción de esperma y existen variaciones étnicas. Estos anticonceptivos están relacionados con efectos secundarios graves, tales como un mayor riesgo de padecer alguna enfermedad cardiovascular, aumento de peso, presencia de acné, cambios de humor y disminución de la libido”.
YCT-529 actúa como inhibidor del receptor alfa del ácido retinoico, un derivado de la vitamina A. Cuando esta molécula orgánica se adhiere a su receptor se habilita la producción de esperma. La píldora masculina bloquea este proceso. En estudios con ratones, el fármaco obtuvo una eficacia de 99% y no se observaron efectos secundarios. Los investigadores afirman que, una vez que se suspende el suministro, el proceso de síntesis de espermatozoides se reanuda por completo.
La píldora anticonceptiva masculina ha sido el santo grial de la investigación y el desarrollo de soluciones de control natal. Los primeros estudios comenzaron en la década de 1950 y 20 años más tarde dieron inicio los ensayos clínicos iniciales. La pastilla YCT-529 es el avance más prometedor hasta el momento.
Expertos indican que el desarrollo de anticonceptivos masculinos se ha limitado por sesgos de género, poco interés comercial, falta de financiación y los efectos secundarios a nivel psicológico y fisiológico que ya han sido registrados en las mujeres.